Escribo para comentarles que hay un torrontés que uno debe probar para decidir si le gusta o no, este varietal tiene la particularidad que se trata de un gusto adquirido, esto quiere decir que hay gente que le gusta y otra que no lo puede ni oler. Yo era uno de los que prefería otro tipo de vinos blancos, le di varias oportunidades y ahora me estoy volviendo un poco fanático. He degustado varios y hasta ahora me quedo con el que motiva estas líneas, se trata del Colomé Torrontés 2006 de la bodega de Donald Hess en Salta. Un blanco vibrante, con aromas a ensalada de frutas tropicales maduras, dulces, con con un dejo a uva moscatel, la impresión al olerlo es que estamos ante la presencia de un vino dulce pero al degustarlo es seco, amable, con una sensación punzante en la lengua, una acidez que le da mucha frescura, buen recuerdo en boca, y lo más importante es rico. El precio $30, pero bueno, lo que cuesta vale.
Hay que darse el gusto, aunque sea una vez.
Salud!